Cuando despertamos, “matamos” aquello con lo que soñamos, pues residía únicamente en ese territorio onírico y mental. Entonces, de alguna manera, somos responsables de esas muertes, que a veces pesan lo suficiente como para mantenerse en nuestra memoria.
La psiquiatra y escritora suizo-estadounidense Kübler-Ross planteó en 1969 la teoría de que la gente lidia con la tragedia con un patrón que suele ser común, que se basa en atravesar cinco fases: la primera, la negación, como una defensa temporal para el individuo; la segunda, la ira; la tercera, la negociación, la cual involucra esperanza de revertir lo que sucede para evitar su final; la cuarta, la depresión y la quinta, la aceptación, que llega con la comprensión y la paz que se encuentra tras dejar de luchar con la muerte. ) negación, ira, negociación, depresión y, finalmente, aceptación.
Una burla a la automatización de las reacciones emocionales. Proyecto en proceso.